Actuador electromecánico para puertas batientes: panorámica general
Qué son los actuadores electromecánicos para puertas batientes
Los actuadores electromecánicos son un tipo de automatismo que se debe aplicar directamente en la hoja de la puerta batiente. Los actuadores son robustos, duraderos y silenciosos: equipar su puerta con un automatismo significa garantizar la máxima comodidad sin provocar fastidiosos ruidos o causar otros problemas. Estos automatismos ofrecen velocidad de momento y se pueden instalar con extrema facilidad en cualquier puerta ya existente; los actuadores electromecánicos, además, se pueden desbloquear manualmente utilizando una llave personalizada. Los actuadores electromecánicos para puertas batientes se pueden completar con accesorios opcionales como el soporte de fijación de varias posiciones, que permite la aplicación incluso en los casos más complicados.
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Las ventajas de un actuador electromecánico para puertas batientes de 12 V
Si se escoge un actuador electromecánico para puertas de batiente de baja tensión de 12 V las ventanas son innumerables: son aptos para uso residencial, en edificios y uso comercial, ya que pueden garantizar un ciclo de trabajo al 100%, soportando un uso continuo e intensivo. Los actuadores electromecánicos de baja tensión incluyen un eficiente sistema para la detección de obstáculos llamado encoder; de esta manera, los automatismos para puertas batientes aseguran la máxima seguridad contra los aplastamientos, respetando las normas en vigor. El actor puede funcionar también sin alimentación eléctrica: las materias opcionales garantizan el correcto funcionamiento del automatismo en cualquier circunstancia.
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Tipos de actuadores electromecánicos para puertas batientes
Los actuadores electromecánicos están disponibles en diferentes versiones a escoger en base al tipo de puerta batiente. Una de las principales diferencias entre los varios modelos es sin dudas el tipo de motor, que podrá ser por ejemplo de 12 V o 230 V. Otro aspecto que hay que tomar en consideración es la longitud de las hojas de la puerta, que podrá ser de hasta 3 m, 4 metros o hasta 5 metros. Independientemente de las exigencias específicas, se puede escoger el actor electromecánico que más se adapte al contexto.